HACE UN AÑO... (Dedicado a todos los blogueros de LD)

Enviado a las 28/02/2009 21:10:45

HACE UN AÑO... (Dedicado a todos los blogueros de LD)

HACE UN AÑO… El Blog de ALMA EN LIBERTAD acaba de cumplir un año. Hoy, 28 de febrero, día de Andalucía, a las 16:18 de la tarde salió publicada la primera entrada, el primer artículo del blog, el cual se titulaba “Soñemos, alma, soñemos ¿Otra vez?”, como un pequeño homenaje a la literatura, en general, y a don Benito Pérez Galdós, en particular. Se iniciaba dedicándolo a la buena gente de Libertad Digital, por ofrecerme este espacio para escribir y publicar en libertad surcando las procelosas y a veces arremolinadas aguas de Internet. Nació el blog con vocación creativa, literaria y humorística, de forma que su lema era (y es) “Libertad y buen humor”. Desde esa premisa tan amplia, podrían tratarse cualquier tema: política, cultura, fútbol o lo que fuera. Así comenzaba aquella entrada del 28 de febrero: "SOÑEMOS, ALMA, SOÑEMOS..." ¿OTRA VEZ? Dedicado a la buena gente de Libertad Digital, sin cuyo soporte este blog no sería posible. También va dedicado a los libertarios, liberales y libérrimos amigos que conviven en LD, en especial a nuestro querido D. Federico Jiménez Losantos, así como a los amigos y colaboradores de su estupendo blog. A mi esposa, que sobrelleva con paciencia mis pequeños delirios literarios.        Queridos amigos de LD, amigos blogueros:      Cuando en noviembre de 1903, D. Benito Pérez Galdós publicó su célebre artículo "Soñemos, alma, soñemos" no sabía que, amén de acercarse a la palpitante España posterior al desastre del 98, estaba inaugurando toda una época en la literatura española. De vivir hoy, Galdós tendría su propia página web, con su blog republicano (¿o quizá no?) y de izquierdas (o no). Aquí y ahora, en la España previa a las elecciones de marzo de 2008, con toda humildad y el buen humor que debería presidir nuestras vidas, quisiera contribuir con mi pequeño granito de arena en las formidables páginas de Libertad Digital, medio a mí entender divino porque no encubre lo humano.        Este blog de un "Alma en Libertad" no tendrá otra divisa que la de "Libertad, respeto y buen humor". Ya comente las noticias de más rabiosa actualidad o ya se vuelva a contemplar los viejos robles del pasado de nuestra nación, siempre se dirá nuestra sincera opinión con toda la modestia de que seamos capaces, pero también con la mayor de las contundencias, con la seguridad de que, sin hallarme en la posesión de la verdad absoluta, tengo derecho a expresarme en libertad y vosotros tenéis ese mismo derecho para poder discrepar cuanto queráis sobre lo que aquí se escriba. Sí que os ruego, acudiendo a vuestra liberalidad, que os atengáis a las normas de LD y a las del propio respeto y buen gusto que son connaturales a un temperamento ilustrado, generoso y liberal, entendidos estos adjetivos en sentido amplio.   El blog de Alma surgió también bajo la protección de varios genios tutelares, el propio Galdós, claro, pero sobre todo don Mariano José de Larra (al que hace poco el infame Gallardón ha usado para seguir mofándose de su propio partido). Larra, de cuyo nacimiento conmemoramos este año el segundo centenario, es el genio tutelar de esta página, el duende satírico del día que anima lo que aquí se escribe y, aunque suene presuntuoso por mi parte, quisiera ser como el pobrecito hablador reencarnado para fustigar las maldades de los políticos y su desidia al defender nuestra querida España. Enseguida apareció en escena el álter ego de don Benito, don Benigno Pérez-López y Galtrés, responsable de la sección llamada “Grandes tipos y tipejos…”, el cual, en compañía de Perezafras, su biógrafo personal, abrieron el camino a tantísimos personajes y personajillos que han ido apareciendo en el Blog, a cual más extraño, estrafalario y estrambótico, como por ejemplo, pongamos por caso, verbigracia, a saber: el gabinete de las Ministras del Fútbol (que tantísimo le gustaron al amigo Alcides), los locuelos periodistas y reporteros de LA VERDAZ DE CALASPARRA (Domitilo Beto Mentodo, Manola Malasaña, Timothea Timothey, etc), el raro asesor político Rufus Lassalle de la Arriolada, Garcinema con las Cartelera de Cine y Teatro, las Series de Antaño en verano, el vate y poetastro Cuchufletto Kimp Hotentote, el descarado y cínico entrevistador argentino Macedonio Malocotton, los inútiles y atrabiliarios productos de la Teletienda del Blog, las cacofonías de Fríker Jiménez, Sherlock Homes y sus nuevas aventuras, o ya más recientemente, el Libro Gordo de Pepiño y el Dr. Frank Ens Tein con su Museo de los Monstruos. El 13 de octubre de 2008 el blog alcanzó sus 100 post. Esta entrada será la número 146 y el contador está en unas 4.200 visitas, muchas de las cuales, es evidente, pertenecen al autor de estas líneas, pero otras muchas, la mayoría, han sido gentileza de todos vosotros, mis queridos amigos y colegas blogueros de LD. Sin vuestro apoyo, sin la amabilidad que habéis tenido al leer las mil y una boberías y disparates de Alma, estas páginas no habrían existido. Seguramente lo habría dejado a los dos días. He de decir que el blog tuvo además su trampa, porque quise experimentar el escribir como una mujer, de ahí, en parte, la razón del nick o pseudónimo. Me consta que el experimento tuvo cierto éxito, pues algunos blogueros creyeron que yo era una mujer. Fijaos que ya en la primera entrada la dedicatoria decía ‘A mi esposa…’. ¡Vaya metedura de pata! Pues casi nadie se dio cuenta, salvo Alcides (qué agudo eres, querido padrino). Con todo, no pasó mucho tiempo sin que los participios en ese ‘-ado’ masculino y mis propias palabras me traicionasen y, para sorpresa de alguno, quedase al descubierto el engaño. Fuera de esa divertida anécdota, he de decir que ha sido un año excelente, que os agradezco infinitamente vuestro cariño, vuestra paciencia y el afecto que siempre me habéis dispensado y que, sin duda, no merezco. He descubierto vuestros blogs, amigos, pero he descubierto algo más importante: la cantidad de buenas personas que hay por estos mundos de Internet. A vosotros y a los amigos de LD, os dedico esta entrada. No citaré ningún nombre, para no olvidarme de ninguno, pero sabéis que, pase lo que pase, dure mucho o poco este blog, os llevaré siempre en mi corazón. Muchísimas gracias, amigos. PS: El mapache y el coatí de Cualquie os envían besos, abrazos y algún mordisquito en las pantorrillas. Hasta pronto, blogueros.